Silvia Rivas

Buenos Aires, Argentina |

1957

Statement

Silvia Rivas es una pionera en la experimentación del videoarte, la video-instalación y de la performance delegada en Argentina y en América Latina, desde principio de los años 90. 
Su obra es una desembocadura, o un recodo profundo, de reflexiones sobre el tiempo figurado y encarnado: la percepción interna del presente, percepción cercada por la densidad del pasado, la resistencia del futuro y lo inevitable de la circunstancia.

Medidas de tiempo humanizadas, ligadas a la existencia vital y a las emociones, que contrastan con la impasible circularidad de los ritmos naturales. Es el tiempo, aquella presencia del instante como punto de quiebre, la urgencia, la espera, el espacio, la ambigüedad, la naturaleza dual de las cosas, la coexistencia de los opuestos y los umbrales que separan distintas situaciones, ejes constantes en su trabajo. Interesada en los límites de las expresiones audiovisuales, en la imagen en movimiento, en la capacidad del video para operar pasajes, capturar gestos y señalar circunstancias; experimentando con diversos soportes y materiales que modela afínes a su poética para figurar sus conceptos; explorando las posibilidades y dimensiones del cuerpo -físico y virtual- a través de una virtuosa forma de performance delegada, contenida por una espacialidad sonora que enriquece sus idiosincrásicas ficciones de tiempo suspendido, las videoinstalaciones de Silvia Rivas exploran la potencialidad del dilema que nos recuerda que la vida es pura contingencia.

Statement

Silvia Rivas has been a pioneer in the experimentation of video art, video installation and performance delegate in Argentina and Latin America, since the beginning of the 90s. Her work is an opening, or a deep bend, of reflections on figurative and embodied time: the internal perception of the present, perception surrounded by the density of the past, the resistance of the future and the inevitability of circumstance.

Humanized measures of time, linked to vital existence and emotions, which contrast with the impassive circularity of natural rhythms. It is time, that presence of the instant as a breaking point, urgency, the wait, space, ambiguity and the dual nature of things, the coexistence of opposites and the thresholds that separate different situations, constant themes in her work. Interested in the limits of audiovisual expressions, in the moving image, in the capacity of video to operate passages, capture gestures and point out circumstances; experimenting with several supports and materials that she models according to her poetics to figure out her concepts; exploring the possibilities and dimensions of the body -physical and virtual- through a virtuous form of delegated performance, contained by a sonorous spatiality that enriches her idiosyncratic fictions of suspended time, Silvia Rivas video installations explore the potential of the dilemma that reminds us that life is pure contingency.

Bio

Silvia Rivas (Buenos Aires, Argentina, 1957) es una precursora del video arte, la video-instalación y de la performance delegada en Argentina y en América Latina. Fue la primera artista audiovisual argentina en haber recibido la beca Guggenheim y otros galardones como el Premio Konex diploma al mérito en Técnicas mixtas (1997-2001) y el Premio Leonardo al Museo Nacional de Bellas Artes y el Premio de Artes Visuales de la Asociación Argentina de Críticos de Arte (2002), entre otros.

Ha realizado numerosas exhibiciones individuales, entre las que se destacan la primera muestra de video-instalación en Buenos Aires – Argentina, en el Centro Cultural Recoleta, Sala Honorífica Cronopios; así́ como su destacada exhibición individual en MALBA, titulada “Zumbido”. Su trabajo se ha exhibido en Chile, Venezuela, Brasil, Cuba, Colombia, México, Estados Unidos, España, Francia, Alemania y Suiza, y ha representado a Argentina en varias bienales internacionales, incluyendo Mercosur (Porto Alegre en 2000 y 2005), La Habana (2003), BienalSur (2016), entre otras. Su obra forma parte de prestigiosas colecciones privadas y reconocidas colecciones institucionales entre ellas: Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires, MALBA – Fundación Costantini, Argentina; Museo de Arte Moderno de Buenos Aires – MAMBA, Argentina; Museo Municipal de Bellas Artes “Juan. B. Castagnino”, Rosario, Santa Fe, Argentina; Museo de la Universidad Nacional de Tres de Febrero – MUNTREF, Buenos Aires, Argentina; Colección Amalia Lacroze de Fortabat, Buenos Aires, Argentina; Centro de Arte Contemporáneo de Santiago de Compostela, Xunta de Galicia, España; Colección Museo Reina Sofía, Madrid, España, entre otras.

Bio

Silvia Rivas (Buenos Aires, Argentina, 1957) is a pioneer of video-art, video-installation and delegated performance in Argentina and Latin America. She was the first audiovisual Argentine artist to have received the Guggenheim fellowship and other awards such as, the Konex Award for Merit Diploma in Mixed Media 1997-2001; and in 2002, the Leonardo Prize of the National Museum of Fine Arts and the Visual Arts Award from the Argentinean Art Critics Association (2002), among others.

She has numerous individual exhibitions in which it is important to highlight, she was the first artist to present the first major video installation shown in the country, at the honorific Cronopios salon at the Recoleta Cultural Center; as well as to note her individual exhibition in MALBA, an outstan- ding immersive video installation entitled “Zumbido”. Her work has been exhibited in Chile, Venezuela, Brazil, Cuba, Colombia, Mexico, United States, Spain, France, Germany and Switzerland, and has represented Argentina in several international biennials, including Mercosur (Portoalegre in 2000 and 2005) La Habana (2003), BienalSur (2016) amongst others. Silvia Rivas works belong to several prestigious national & international collections and recognized institutional collections including: Museum of Latin American Art of Buenos Aires, MALBA – Costantini Foundation, Argentina; Museum of Modern Art of Buenos Aires – MAMBA, Argentina; Municipal Museum of Fine Arts “Juan. B. Castagnino ”, Rosario, Santa Fe, Argentina; Museum of the National University of Tres de Febrero – MUNTREF, Buenos Aires, Argentina; Amalia Lacroze Collection of Fortabat, Buenos Aires, Argentina; Center of Contemporary Art of Santiago de Compostela, Xunta de Galicia, Spain; Reina Sofia Museum Collection, Madrid, Spain, among others.

Obras

El Revés de la Armadura
2021

Sobre la serie

El revés de la armadura es una serie de videoinstalaciones donde objetos de hierro, proyecciones sobre papel, pantallas led y sonido espacializado juegan en tensión.
En los videos se registran acciones performáticas de mujeres vestidas con prendas de papel de seda intervenido, donde a través del tacto y resistencia del material se manifesta la tensión entre la inevitable rasgadura de las piezas y el deseo y necesidad de preservarlas intactas.

Más información

Al explorar cualidades materiales de plasticidad, resiliencia y fragilidad, con estados emocionales y psicológicos Silvia Rivas intenta indagar sobre nuestros recursos y capacidad de resistencia ante situaciones de extrema vulnerabilidad. Así busca visibilizar la tensión entre la inevitable rasgadura de lo que nos cubre y protege y el deseo de preservar su imagen e integridad intacta.

Se trata de poner en acto imágenes mentales con la intención de señalar estos interrogantes desde el punto de vista del sujeto, su desasosiego y sus miedos.
A partir del cruce de soportes y materialidades, S.R. piensa nuestra integración como seres naturales con el entorno y la materia transformada. En este juego de materialidades el soporte con sus recursos formales y tecnológicos se evidencia como una poética en sí misma.

Exuvia 2

De la serie El revés de la armadura
Exuvia 2
Año 2021
Video Instalación
Video monocanal 4K y pantalla de papel de seda y vegetal intervenido. Sonido stereo
Duración | Duration 2’ 32’’ en loop
Edición 5 + 2 A/P
Silvia Rivas

El revés 1

De la serie El revés de la armadura
El revés 1
Año 2022
Video Instalación
Video monocanal 4K en monitor vertical. Sonido stereo
Duración 1’ 14’’ en loop
Edición 3 + 2 A/P
Silvia Rivas

Exuvia 3

De la serie El revés de la armadura
Exuvia 3
Año 2021
Video Instalación
Video monocanal 4K y pantalla de papel de seda y vegetal intervenido. Sonido stereo
Duración 2’ 32’’ en loop
Edición | Edition 5 + 2 A/P
Silvia Rivas

Así lo propio 1

De la serie El revés de la armadura
Así lo propio 1
Año 2021
Video Instalación
Video monocanal 4K. Sonido stereo
Duración 2’ 57’’ en loop Edición 3 + 2 A/P
Silvia Rivas

Así lo propio 3

De la serie El revés de la armadura
Así lo propio 3
Año 2021
Video Instalación
Video monocanal 4K. Sonido stereo
Duración 1’ 39’’ en loop Edición | Edition 3 + 2 A/P
Silvia Rivas

Así lo propio 2

De la serie El revés de la armadura
Así lo propio 2
Año 2021
Video Instalación
Video monocanal 4K. Sonido stereo
Duración 1’ 37’’ en loop Edición | Edition 3 + 2 A/P
Silvia Rivas

La armadura

De la serie El revés de la armadura
La armadura
Año 2022
Objeto
Pinza de herrería papel de seda, aceite de lino
Dimensiones 0.32 x 60 x 25 cm Pieza única
Silvia Rivas

Exuvia 1, 2 y 3

De la serie El revés de la armadura
Exuvia 1, 2 y 3
Año 2021
Triptico
Video Instalación
Video monocanal 4K y pantalla de papel de seda y vegetal intervenido. Sonido stereo
Duración 2’ 32’’ en loop
Edición | Edition 5 + 2 A/P
Silvia Rivas

Exuvia 1, 2

De la serie El revés de la armadura
Exuvia 1, 2
Año 2021
Triptico
Video Instalación
Video monocanal 4K y Sonido stereo
Duración 2’ 32’’ en loop
Edición | Edition 5 + 2 A/P
Silvia Rivas

Fuerza diagonal
2019

Sobre la serie

Fuerza diagonal es un proyecto multidisciplinar compuesto por objetos y videoinstalaciones en los que tecnologías ancestrales se integran con las contemporáneas en una misma pieza. Este proyecto esta vinculado con la serie de videoinstalaciones Todo lo de Afuera de 2004 en la que se señala la imposibilidad o el impedimento como devenir, donde el conflicto se escenifica como objetivo y condición de vida, en Fuerza diagonal en cambio, el nudo se destraba en una posibilidad desde lo individual generando así un contrapunto con su antecedente.

Más información

El proyecto instalativo toma su título y la consigna básica para su desarrollo performático del concepto de acción inspirado en el pensamiento de Hannah Arendt, en el que se entiende la acción como la condición humana de recrear su propia vida dentro de la pluralidad. Fuerza diagonal es la energía generada como escenario en el se despliega el presente. La video-instalación surge del registro de una serie de performances investigando las posibilidades del cuerpo de representar la acción como concepto. Cuando lo privado se revela y entra así a participar de todo lo de afuera, del mundo. Pensar la acción como el punto de partida que nos constituye en lo que somos. Los performers son jóvenes de formación y extracción diversa cuya energía de acción es formalmente representativa de la fuerza diagonal a la que refiere el trabajo. Si bien se trata del actuar en un tiempo en el que, “ el dominio público ha perdido el poder de iluminar”1 , más allá de la coyuntura se busca generar una reflexión sobre la condición del hombre entendiendo la acción como pensamiento.

1-H. Arendt, “Hombres en tiempos de oscuridad”

Trinchera

De la serie Fuerza Diagonal
Trinchera
Año 2019
Video Instalación Videoinstalación de canales variables Variable channel video-installation Video HD |
Medidas variables
Duración 5’ 24’’ en loop Edición 3 + AP
Silvia Rivas

Nudo 2

De la serie Fuerza Diagonal
Nudo 2
Año 2019
Fotografía
Impresión a chorro de tinta sobre papel de algodón Inkjet print on cotton paper
Medidas 58,5 x 16 cm | Edición | Edition 3 + AP
Silvia Rivas

Nudo 4

De la serie Fuerza Diagonal
Nudo 4
Año 2019
Fotografía
Impresión a chorro de tinta sobre papel de algodón Inkjet print on cotton paper
Medidas 58,5 x 16 cm | Edición | Edition 3 + AP
Silvia Rivas

Nudo II

Silvia Rivas
De la serie Fuerza Diagonal
Nudo II
Año 2019
Video Instalación Instalación de un canal de video para monitor HD 24”, vidrio, hierro.
Video HD | HD Video
Duración | Duration 4’ 01” loop
34 x 55 x 16 cm | Edition 3 + AP

Pose inicial

Silvia Rivas
De la serie Fuerza Diagonal
Pose inicial
Año 2019
Video Instalación
Dos canales para monitores HD 17’’.
Video HD, vidrio y hierro..
Dimensiones 29 x 94 x 19 cm
Duración 0’ 20’’ en loop
Edición 3 + AP + copia de exhibición

Nudo II

Silvia Rivas
De la serie Fuerza Diagonal
Nudo II
Año 2019
Video Instalación Instalación de un canal de video para monitor HD 24”, vidrio, hierro.
Video HD | HD Video
Duración | Duration 4’ 01” loop
34 x 55 x 16 cm | Edition 3 + AP

Organismo

De la serie Fuerza Diagonal
Organismo
Año 2019
Video Instalación
Video Instalación de dos canales de video.
Video HD
Duración 4’ 14’’ en loop
Medidas variables
Edición 3 + 2 AP + copia de exhibición
Silvia Rivas

Bocetos 1

De la serie Fuerza Diagonal
Bocetos 1
Año 2019
Dibujo
Grafito sobre papel de libreta Moleskine
Dimensiones 22 × 98 cm
Pieza única
Silvia Riva

Bocetos 4

De la serie Fuerza Diagonal
Bocetos 4
Año 2019
Dibujo
Grafito sobre papel de libreta Moleskine
Dimensiones 22 × 98 cm
Pieza única
Silvia Rivas

Momentum
2015

Sobre la serie

Es una serie de videos y video-instalaciones con piezas a diferentes escalas.
Definir el instante previo a cualquier acontecimiento como una posible unidad de tiempo, una unidad en la que la medida convencional se detiene, señalar en la inminencia la fragilidad del instante, estirarlo. La imagen, que como tal, es un rastro de luz, una proyección.

Más información

El momento, intangible como la imagen, como un pensamiento, como un empuje, como la deriva, pero antes… El momento que se mide por su resistencia, por su densidad imborrable. La imagen, doble suspendido de un cuerpo, siempre efímero, en un instante siempre pasado, es su única prueba. En vano intentamos controlar el decurso de nuestras vidas. Tal vez nuestra potencia se manifieste como vivencia sólo en el instante previo a cualquier desenlace, en la condición de vértigo, en la sensación de despertar en el aire.

Decision I

De la serie Momentum
Decision I
Año 2015
Video instalación de un canal
Video HD | HD Video
Medidas variables
Duración 1’ 35’’ en loop
Edición | Edition 3 + AP
Silvia Rivas

Soltar - Caer

Silvia Rivas
De la serie Momentum
Soltar-caer
Año 2015
Video instalación de dos canales para monitores en vertical Samsung 32´´
Video HD
Duración 0’ 16’’ loop
Edición 3 + AP

Dureé I

Silvia Rivas
De la serie Momentum
Dureé I
Año 2015
Video instalación monocanal
en pantalla LCD de 10´
Video HD
Duración 1’ 16’’ loop
Edición 3 + AP

Dureé I

Silvia Rivas
De la serie Momentum
Dureé I
Año 2015
Video instalación monocanal
en pantalla LCD de 10´
Video HD
Duración 1’ 16’’ loop
Edición 3 + AP

Dureé II

De la serie Momentum
Dureé II
Año 2015
Video instalación de cuatro canales
Cuatro pantallas LCD de 10´ sobre
trípodes de aluminio
Video HD
Medidas variables
Duración 0’ 16’’ en loop
Edición 3 + 1 AP
Silvia Rivas

Dureé II

De la serie Momentum
Dureé II
Año 2015
Video instalación de cuatro canales
Cuatro pantallas LCD de 10´ sobre
trípodes de aluminio
Video HD
Medidas variables
Duración 0’ 16’’ en loop
Edición 3 + 1 AP
Silvia Rivas

Soltar - Caer

De la serie Momentum
Soltar-Caer
Año 2015
Video instalación de dos canales para monitores en vertical Samsung 32´´
Video HD
Duración 0’ 16’’ loop
Edición 3 + AP
Silvia Rivas

Sobre Lo Inminente
2012-2015

Sobre la serie

La serie Sobre lo inminente está compuesta de piezas de uno o dos canales de video para pantallas led de 24” aproximadamente.
Dentro de la más pura tradición pictórica esta serie homenajea uno de los géneros más queridos de la pintura y la fotografía. Dando protagonismo a las estrategias de representación y su materia, a la luz, el color, la composición y su capacidad de mostrar un mundo y un tiempo con el simple ordenamiento de algunos objetos cotidianos.

Más información

La construcción de la obra busca la contradicción, servirse del medio electrónico y la imagen en movimiento para finalmente registrar la quietud y volver una vez más al intento de materializar el tiempo.
Cuestionar el presunto realismo del video llevándolo al extremo.
La naturaleza hiperreal de los videos que conforman este proyecto busca una seducción sospechosa, reflexionar sobre el poder del relato audiovisual, sobre sus promesas, preguntarse sobre las imágenes y sus referentes. En Daño inminente un plato de leche sobre un mantel de hilo blanco, la brisa apenas mueve la cortina también blanca detrás de la cual se adivina un afuera luminoso y vegetal.
El zumbido de una mosca se presiente como una amenaza en la quietud y pureza de una escena, una sencilla naturaleza muerta. La inminencia de esta amenaza busca definir el instante previo a cualquier acontecimiento como una posible unidad de tiempo.

Riqueza

De la serie Sobre lo inminente
Riqueza
Año 2017
Porcelana, Pantalla 12” HD LCD,
moneda Argentina
Video HD
Medidas 23 × 28 × 24 cm
Pieza única
Silvia Rivas

Abundancia

De la serie Sobre lo inminente
Abundancia
Año 2017
Porcelana, Pantalla 12” HD LCD,
monedas Argentinas
Video HD
Duracion 7’ 35’’ loop
Medidas 23 × 28 × 24 cm
Pieza única
Silvia Rivas

Outcome II

De la serie Sobre lo inminente
Outcome II
Año 2017
Porcelana, loza, resina
Medidas 12 × 30 × 27 cm
Pieza única
Silvia Rivas

Igual el paraíso es nuestro
2014

Sobre la serie

Esta serie de instalaciones es como un ejercicio compositivo donde se mezclan restos y objetos preciosos con el fin de generar pequeñas escenas  que son sinécdoque del edén, una especie de Aleph editado, donde encontrar, atesorar y controlar un lugar para vivir soñado. Pero para que la materialización del sueño sea verosímil, portátil y confiable debemos echar mano a la ubicua imagen de pantalla donde se abre infinita toda laabundancia negada en el afuera, sueño cuyo objeto a mudado absurdamente en artificialidad.

Más información

Se trata de señalar la relación de exclusión del hombre actual de su entorno, cuando el sentido de pertenencia está divorciado de la sensación de plenitud. Siendo el paraíso natural presente, vecino o circundante se hace vallado e inaccesible y solo parece realizarse en su representación. No se trata de hablar de la relación del hombre con la naturaleza, sino de su condición de ser que encuentra salvación en una construcción mental idealizada.

Igual el paraíso es nuestro (Huracán)

De la serie Paraisos
Igual el paraíso es nuestro (Huracán)
Año 2015
Instalación de video, pantalla HD LCD 9”, piedras, plantas, ventilador y porcelana Limoges
Dimensiones variables
Pieza única
Silvia Rivas

Igual el paraíso es nuestro (Tifón)

De la serie Paraisos
Igual el paraíso es nuestro (Tifón)
Año 2014
Instalación de video, pantalla HD LCD 9”,
piedras, porcelana Limoges y cables
Dimensiones variables dimensions
Pieza única
Silvia Rivas

Igual el paraíso es nuestro II

De la serie Paraisos
Igual el paraíso es nuestro II
Año 2014
Instalación de video, pantalla HD LCD 9”, piedras, plantas, tablones de madera y porcelana Limoge
Dimensiones variables
Pieza única
Silvia Rivas

Zumbido
2010

Sobre la serie

Serie de video-instalaciones donde están señaladas tanto la coincidencia como el desajuste entre una causa y su efecto. Adjetivar cualidades en cierta acción temporal. La sincronía levemente desplazada o fatalmente encadenada entre una intención y su resultado.

Más información

Una acción: una consecuencia… el círculo vicioso. Una situación de partida devenida en condición de hecho. Cada acción es en sí misma una reacción, qué según su definición no es más que una acción provocada por otra y de efectos contrarios a ella. Insistir, ejercer una influencia o la frustración en este intento, del propósito al sinsentido, la exasperación y la ironía, son cuestiones que circulan por una simple acción. Sujetos libres involucrados en dinámicas comprometidas: todo movimiento implica una relación de partes.

Dinámicas Escena 3

Silvia Rivas
De la serie Zumbido
Dinámicas Escena 3
Año 2011
Impresión giclée sobre
papel fotográfico
Dimensiones 83 × 200 cm

Dinámicas

De la serie Zumbido
Dinámicas
Año 2010
Video instalación de un canal multidisplay
Video HD y animación digital / Sonido 5.1 HD
Duración 3’ 45” loop
Dimensiones variables
Edición 5 + A/P
Silvia Rivas

Dinámicas Escena 2

De la serie Zumbido
Dinámicas Escena 2
Año 2011
Impresión giclée sobre
papel fotográfico
Dimensiones 63 × 110 cm
Silvia Rivas

De la serie Zumbido

Año 2010
Video instalación
Video de canales variables
para monitores 12”. Sonido stereo
Duración 5.1. 2’ 10” loop.
Edición 5 + AP
Silvia Rivas

Odiseas y recorridos
2012

Sobre la serie

Dibujos-grafismos a escalas diferentes e intervenciones en las paredes muestran recorridos y dinámicas, expresiones de ritmo y velocidad, trayectos obsesivos, plácidos, cadenciosos o tortuosos.
Como un trabajo maníaco constituye una representación gráfica de infinitos circuitos invisibles, el vuelo de un insecto, de un enjambre, partículas puestas en movimiento por el viento.
Cada dibujo es la expresión de una odisea invisible. Sobre todo aquello que circula en un espacio, un gesto imprimiendo un carácter y una tensión, una línea trazando un recorrido. Rastros que materializan implícitamente el espacio vacío.

Más información
Recorrido Aceleración 1

De la serie Odisea invisible
Recorrido Aceleración 1
Año 2014
Grafito sobre papel Schoeller
Graphite on Schoeller paper
Dimensiones 31 x 88 cm
Dimensions 79 x 223,52 in
Pieza única | Single piece
Silvia Rivas

Recorrido Aceleración 10

De la serie Odisea invisible
Recorrido Aceleración 10
Año 2014
Grafito sobre papel Schoeller
Dimensiones 32,5 x 109,5 cm
Pieza única 
Silvia Rivas

Recorrido Aceleración 11

De la serie Odisea invisible
Recorrido Aceleración 11
Año 2014
Grafito sobre papel Schoeller
Dimensiones 32,5 x 109,5 cm
Pieza única 
Silvia Rivas

Recorrido Aceleración 12

De la serie Odisea invisible
Recorrido Aceleración 12
Año 2014
Grafito sobre papel Schoeller
Dimensiones 32,5 x 109,5 cm
Pieza única 
Silvia Rivas

Recorrido Aceleración 13

De la serie Odisea invisible
Recorrido Aceleración 13
Año 2014
Grafito sobre papel Schoeller
Dimensiones 32,5 x 109,5 cm
Pieza única 
Silvia Rivas

Recorrido Aceleración 14

De la serie Odisea invisible
Recorrido Aceleración 14
Año 2014
Grafito sobre papel Schoeller
Dimensiones 32,5 x 109,5 cm
Pieza única 
Silvia Rivas

Recorrido Aceleración 15

De la serie Odisea invisible
Recorrido Aceleración 15
Año 2014
Grafito sobre papel Schoeller
Dimensiones 32,5 x 109,5 cm
Pieza única 
Silvia Rivas

Paisaje a Definir
2008

Sobre la serie

Serie compuesta por videos uno o dos canales e impresiones únicas sobre papel fotográfico. Paisaje a definir habla del Rio de la Plata como superficie análoga a la llanura con la cual se funde y también como un escenario de atracción y albergue devenido de peligro y rechazo. 

Más información

Definir este paisaje por  su mínima geometría que no atrapa la mirada sino en el trazo ligerísimo del horizonte, por el color a tierra fundida en agua… o por la reverberancia de la luz llorando lo que oculta en la suave textura del plano. El horizonte es dirección y certeza, una línea tras la cual inevitablemente se encuentra una realidad habitable. Flotan pétalos rojos intensos, van y vienen como miles de historias individuales.

Migrantes III

De la serie Paisaje a definir
Migrantes III
Año 2008
Impresión lambda sobre papel
Dimensiones 120 x 200 cm
Pieza única 
Silvia Rivas

Migrantes II

De la serie Paisaje a definir
Migrantes II
Año 2008
Impresión lambda sobre papel
Dimensiones 120 x 200 cm
Pieza única 
Silvia Rivas

Layers III

De la serie Paisaje a definir
Layers III
Año  2008
Impresión Glicée, papel vegetal, alfileres Dimensiones 46 × 105 cm
Pieza única
Silvia Rivas

Layers V

De la serie Paisaje a definir
Layers V
Año  2008
Impresión Glicée, papel vegetal, alfileres Dimensiones 46 × 105 cm
Pieza única
Silvia Rivas

Tiny Events
2005 - 2006

Sobre la serie

Serie de videos, video-instalaciones y obras sobre papel. Ese desfasaje o mirada descentrada es la sintaxis del discurso, el componente necesario para “decir” la condición del ser de la que estoy hablando. Todo es contrapunto entre estas fisonomías pegadas a un fondo carente de referencias espaciales y el transitar de un caminante que registra sumariamente con la mirada vuelta al piso los vestigios de un barullo ajeno.

Más información

Por un lado un paisaje que no alberga otra cosa que lo inservible, escenario de lo trivial, una superficie que no alcanza la jerarquía de “lugar”; por el otro la presencia contundente de un rostro, de un sujeto y su individualidad como único lugar posible. Un cambio de actitud no se lee necesariamente en las señales o ademanes del cuerpo, por lo menos no en forma muy evidente. La intensidad del gesto es contraria a la grandilocuencia. Además en este caso, el levantar la vista y ver, no es garantía de nada, es un acontecimiento interno. No hay certeza, solo abre una posibilidad. Como diría Kierkegaard , aquí la “verdad es la subjetividad”, y la subjetividad está confinada dentro de los límites de un cuerpo.

Horizonte partido I 

De la serie Tiny Events
Horizonte partido I 
Año 2006
Video-instalación de canales variables
Edición 5 + A/P
Silvia Rivas

Horizonte partido II

De la serie Tiny Events
Horizonte partido II
Año 2006
Video-instalación de canales variables
Edición 5 + A/P
Silvia Rivas

Horizonte partido III

De la serie Tiny Events
Horizonte partido III
Año 2006
Video-instalación de canales variables
Edición 5 + A/P
Silvia Rivas

Sin título 

De la serie Tiny Events
Sin título
Año  2006
Fotografía intervenida
Impresión chorro de tinta y gouache sobre papel Magnani
Dimensiones 45 x 200 cm.
Silvia Rivas

Sin título 

De la serie Tiny Events
Sin título
Año  2006
Fotografía intervenida
Impresión chorro de tinta y gouache sobre papel Magnani
Dimensiones 45 x 200 cm.
Silvia Rivas

Sin título 

De la serie Tiny Events
Sin título
Año  2006
Fotografía intervenida
Impresión chorro de tinta y gouache sobre papel Magnani
Dimensiones 90 x 200 cm.
Silvia Rivas

Todo lo de Afuera
2005 - 2006

Sobre la serie

Serie de video-instalaciones y videos monocanal. Bajo el título general de Todo lo de afuera, se presenta un juego de relaciones entre videos y videoinstalaciones. Cada parte de esta serie de imágenes plantean un recorrido en donde la mirada queda ligeramente desplazada con respecto a la anterior señalando la imposibilidad y el impedimento como devenir, donde el conflicto se escenifica como objetivo.

Más información

Un ojo cegado es la metáfora de aquello que nos es inaccesible, un grupo de personas gira en un forcejeo eterno e inútil. Este “sinfín” compuesto de imágenes, muestra la eternidad de la condena. A la vez, estas imágenes simbólicas se enmarcan en un entorno sonoro concreto: tarareos, suspiros, el jadear del propio esfuerzo remiten a voces interiores de un sujeto que se presenta algunas veces fragmentado, enmarcado en el encuadre de los monitores y otras indiferenciado en un entrevero de cuerpos proyectados en el espacio. Todo lo de afuera es el interrogante, objeto impreciso, deseo difuso. Las imágenes retratan una sensación, que, como tal, no es posible describir… Pero, la certeza de la existencia de un entorno que no es accesible, la tenaz insistencia por vencer el impedimento y la figura de ese impedimento circulan como movimientos de una misma pieza. El cuerpo es el límite y este límite es lo único cierto. Son momentos vacíos, no hay acontecimiento alguno, es todo circunstancia. Como en las horas de insomnio no hay mojón que dibuje un trayecto. Así las cosas… alguien se canta a sí mismo para sostenerse, para que el eco fije los límites de todo lo que está adentro.

Todo lo de afuera

De la serie Todo lo de afuera
Todo lo de afuera
Año 2004
Videoinstalación de canal variable. vídeo DV. Sonido estéreo
Edition 3,4,5 de 5 + AP
Silvia Rivas

Distortion 

De la serie Todo lo de afuera
Distortion
Año 2004
Videoinstalación de canal variable. vídeo DV. Sonido estéreo
Edition 3/3 + AP
Silvia Rivas

Primer movimiento

De la serie Todo lo de afuera
Primer movimiento
Año 2004
Videoinstalación monocanal
Monitores de tubo
Video DV. Sonido estéreo
Edition 3/3 + AP
Silvia Rivas

Abismo negro en abismo negro

De la serie Todo lo de afuera
Abismo negro en abismo negro
Año  2004
Videoinstalación monocanal.
Video DV. Sonido estéreo
Edition 3/3 + AP
Silvia Rivas

Abismo negro en paisaje blanco

De la serie Todo lo de afuera
Abismo negro en paisaje blanco
Año 2004
Videoinstalación monocanal.
Video DV. Sonido estéreo
DV video. Stereo sound
Duración 7´ 59´´ loop
Edition 3/3 + AP
Silvia Rivas

Marisma (Estructura)

De la serie Todo lo de afuera
Marisma (Estructura)
Año  2005
Fotografía intervenida
Dimensiones 23 x 23 cm.
Silvia Rivas

Llenos de Esperanza
2003

Sobre la serie

Llenos de esperanza es una serie de video-instalación de canales, medidas y dispositivos variables ya que a partiendo de cinco videos digitales básicos adopta diseños de montaje únicos y específicos, para lo que se vale en cada caso de diferentes dispositivos que aporten o acompañen las distintas capas de sentido de la obra. Dar imagen a la percepción de presente, fijar esa sensación fugitiva de “estar ahí”. La dinámica se desarrolla en un espacio en el cual está inserto el hombre en su presente, queriendo fijar lo que desaparece, resistiendo lo inevitable.

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Varias imágenes aisladas refieren a la percepción interna de presente, percepción cercada por la densidad del pasado, la resistencia del futuro y lo inevitable de la circunstancia. Alguien se sostiene como único pilar, alguien se sostiene para evitar caer y alguien lucha una batalla perdida. El viento sopla en un paisaje con una dinámica que responde a un proceso indiferente al resultado de su acción. En este contexto está inserto el hombre en su presente, queriendo fijar lo efímero, resistiendo lo inevitable. La acción está definida por el impedimento, no logra operar sobre el contexto, es su rehén, reflejo y consecuencia. El esfuerzo se torna en único y eterno acontecimiento.

Resistencia

De la serie Llenos de esperanza
Resistencia 
Año 2002
Video monocanal
Single channel video
Edition of 5 + AP
Silvia Rivas

Llenos de esperanza (Instalación)

De la serie Llenos de esperanza
Año 2002
Videoinstalación de canales variables.
Video DV. Sonido estéreo
Silvia Rivas

Condena

De la serie Llenos de esperanza
Condena
Año 2002
Videoinstalación de cuatro canales variables.
Monitores de tubo
Edition of 2 + AP
Silvia Rivas

Llenos de esperanza (Instalación 2)

De la serie Llenos de esperanza
Año 2002
Videoinstalación de canales variables.
Video DV. Sonido estéreo
Silvia Rivas

Notas del tiempo
2000 - 2009

Sobre la serie

Serie de video-instalaciones que montada en su conjunto plantea un recorrido sensorial. Las imágenes, proyectadas en grandes dimensiones sobre los muros y el sonido generan ritmos intensos. El espectador se ve inmerso alternativamente en una dominante de color y sonido percibiendo en un segundo plano otras situaciones rítmicas.

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Transcursos de agua, lluvias, turbulencias, pasos urgentes o un círculo absolutamente negro que va anulando en su trayecto una sucesión de arcos son las escenas que convierten la sala en una especie de organismo en el que cada una de las instalaciones pone el acento en una cualidad específica del tiempo como experiencia. La materia en la que encarna el tiempo, el vacío donde ésta se anula. La duración como una vida y el instante en el que todo cambia; el tiempo como escenario. Marcar… borrar. Como el mar, pasar de ida y de vuelta tejiendo secuelas.

Espera II 

De la serie Notas sobre el tiempo
Espera II
Año 2000
Video-instalación de 9 canales
Edición | Edition 5 + AP
Silvia Rivas

Materia de tiempo

De la serie Notas sobre el tiempo
Materia de tiempo
Año 2001
Canales variables 
Video-instalación
Edición | Edition 5 + AP
Silvia Rivas

Lluvia

De la serie Notas sobre el tiempo
Lluvia
Año 2000
Video-instalación de 2 canales
Edición | Edition 5 + AP
Silvia Rivas

Infinito recurso 

De la serie Notas sobre el tiempo
Infinito recurso
Año 2001
Video-instalación monocanal
Editions 2, 3, 4, 5 of 5 + AP
Silvia Rivas

Transcurso y urgencia 10

De la serie Notas sobre el tiempo
Transcurso y urgencia 10
Impresión inkjet sobre papel de algodón
Dimension 121 x 200 cm
Silvia Rivas

Transcurso y urgencia 3

De la serie Notas sobre el tiempo
Transcurso y urgencia 3
Impresión inkjet sobre papel de algodón
Dimension 121 x 200 cm
Silvia Rivas

Transcurso y urgencia 6

De la serie Notas sobre el tiempo
Transcurso y urgencia 6
Impresión inkjet sobre papel de algodón
Dimension 121 x 200 cm
Silvia Rivas

Nocturno
2022

Sobre la serie

Serie de videos e impresiones sobre papel fotográfico. La luna ilumina con su luz prestada. Cruza un perro callejero, ciruja de nobles ancestros.

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Nocturno III

De la serie Nocturnos
Nocturno III
Año  2002
Impresión inkjet sobre papel de algodón
Dimensiones 20,4 x 27,5 cm
Silvia Rivas

Nocturno II

De la serie Nocturnos
Nocturno II
Año 2002
Impresión inkjet sobre papel de algodón
Dimensiones 20,4 x 27,5 cm
Silvia Rivas

Anubis perdido 

De la serie Nocturnos
Anubis perdido
Año 2002
Video monocanal
Single channel video
Silvia Rivas

Textos

Silvia Rivas 2010
Zumbido
Por Silvia Rivas
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Señalar la coincidencia, o bien el desajuste
entre una causa y su efecto.

Adjetivar cualidades en cierta acción temporal.

La sincronía levemente desplazada
o fatalmente encadenada entre una intensión y su resultado.

Una acción: una consecuencia…
la reversibilidad, el círculo vicioso.

Insistir, ejercer una influencia
o la frustración en éste intento,

Del propósito al sinsentido, la exasperación y la ironía,
son cuestiones que circulan por una simple acción.

/

Buzzing points out the coincidence, or better still the maladjustment between a cause and its effect.

Attach qualities in a certain temporary action. The synchrony lightly displaced or fatally chained between intension and its result. An action: a consequence… the reversibility, the vicious circle.

Insistence, exercising an influence or frustration in this intent, of the purpose to nonsense, exasperation and irony, are issues that circulate by a simple action.

In a screen the unusual action trying to group the swarm. Later, the juxtaposition of actions hitched among themselves.

The interaction of several associated dynamics as an assembly of syncopated rhythms where the action and their reaction are inevitably forced to the unexpected result.

The stress is positioned on one’s self-experience generating in the spectator an experience of concrete associations.

Monografía para la carrera de Artes, Facultad de Filosofía y Letras, Universidad de Buenos Aires, 2010
Silvia Rivas: filosofía en video
Por Florencia Malbrán
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“El tiempo no es una simple experiencia de la duración, sino un dinamismo que nos lleva, más que a las cosas que poseemos, a otra parte”.
(Emmanuel Levinas)

En los últimos años, Silvia Rivas ha elegido el video como medio de expresión para su singular poética. A partir de esta decisión, ha logrado transmitir sensaciones que inducen a la reflexión sobre temas tan abstractos o filosóficos como el tiempo, la idea del otro, la visión de la subjetividad y la individualidad. Todas estas nociones son abordadas desde una perspectiva ambigua que funciona como eje para los distintos planteos que hace la artista a partir de su obra.

Las temáticas elaboradas en la obra ponen acento en la materialidad y hacen referencia a una cotidianeidad. Rivas hace hincapié en planteos que se refieren a la vida diaria señalando lo profundo y el entredós de las relaciones humanas. Para mí el soporte tiene que ver con la poética de lo que estoy diciendo, señala la artista, remarcando la importancia que tiene para ella la elección del mismo y los materiales que utiliza en su obra.

Silvia Rivas se graduó en la Escuela Nacional de Bellas Artes Prilidiano Pueyrredón como profesora nacional de dibujo y escultura. También hizo seminarios con Victor Grippo, quien estaba muy identificado con el vínculo entre el soporte y su concepto; y para Rivas, la gran lección de Grippo como artista fue precisamente la relación con el material, tener siempre en cuenta el soporte, y que éste sea protagonista o parte integrante de la poética.

Aunque de modo muy distinto, Silvia Rivas también ha logrado hablarle al espectador desde el soporte, así como también desde los materiales que elige para trabajar. Esta cuestión ha sido definitoria para la elección del trabajo con metales, agua o resina, en etapas anteriores. Asimismo, cuando la artista decide trabajar de manera intensiva con el video, lo asume como un medio más para expresar y lograr las sensaciones que busca.

Al mismo tiempo, en su obra se destaca una denuncia constante del soporte, como por ejemplo, el papel preponderante que puede ocupar el píxel en la fotografía, o manifestar la intención de que el espectador no pierda la consciencia de lo que realmente está viendo es una pantalla, o una proyección.

Para Rivas, es central la imagen en movimiento, y gracias a la misma logra expresar aquello que busca. “Notas sobre el tiempo”, es una video instalación que muestra en distintas escenas la doble naturaleza del tiempo. Fue presentada en 2001 en el Centro Cultural Recoleta y está compuesta por distintos videos. En ésta video instalación puede apreciarse una propuesta ambigua que será eje en toda la obra de la artista. Se produce en ella una oposición entre piernas y agua en movimiento: ya sea lluvia, cascada u olas gracias a la combinación de distintos videos. Uno de ellos describe a una persona subiendo una escalera (donde sólo se alcanza a ver parte de sus zapatos); en otro video puede verse una constante lluvia sobre un fondo rojo; en otro una composición de nueve cuadros en los que puede verse en cada uno de ellos un par de piernas, y luego de quitar uno de esos cuadros, la artista desarrolla un juego con el fondo en rojo asociado a una cascada.

Hay algunos videos más, donde la idea es la misma, la presentación por un lado del agua y por el otro de las piernas en movimiento. Todos los videos están realizados en rojo, blanco y negro. La carencia de policromía será también una característica de toda la obra de la artista. Cada video es acompañado de un sonido que intensifica las sensaciones que produce en el espectador (ya sea de las olas del mar, de la lluvia o de los pasos que suben la escalera).

A mi me interesaba como el tiempo deja huellas y al mismo instante las borra, afirma Rivas. El tratamiento del tiempo como cosa, y no como un concepto, en palabras de la artista, es una mezcla de percepción subjetiva y algo objetivo inasible y que se le podría adjudicar cierta materialidad. El desarrollo del tiempo que logra hacer la artista a través de los videos no es de ninguna manera narrativo. Generalmente trabaja con loop, lo que hace que sea el propio espectador el que haga el recorte de la obra, y que decida la duración de cada video para desplazar su mirada hacia el próximo, sumergido en un ambiente creado especialmente por la arista. En este contexto, la imagen y el sonido rodean al espectador causando sensaciones. De esta manera, Rivas logra captar el instante y la continuidad de forma simultánea.

Tal como señala Merleau-Ponty; “Ver, ¿no es siempre ver desde alguna parte?” La artista en su obra va a tratar la visión de la subjetividad del filósofo francés. En “Todo lo de afuera”, Rivas trata el tema del otro y la definición de la propia individualidad a partir del otro. Aquí vuelve a retomar el tema de la ambigüedad, ya que la relación con el otro siempre es ambigua. En esta video instalación se produce un juego entre videos que representan ojos cerrados que intentan abrirse, y otros en los que puede verse un grupo de personas entrelazadas en movimientos decirse en una especie de nudo humano. Estos ojos cerrados miran hacia adentro, y esa mirada es una posibilidad de acceder al objeto; en este caso a la propia subjetividad. Por otro lado, los cuerpos entrelazados son lo otro, lo de afuera, pero ese afuera también significa y define la propia individualidad.

En palabras de Emmanuel Levinas: “el otro no es próximo a mí simplemente en el espacio, o allegado como un pariente, sino que se aproxima esencialmente a mí en tanto yo me siento –en tanto yo soy- responsable de él”. El filósofo plantea un vínculo más comprometido con el otro porque de otra manera no habría tal vínculo. Esto mismo puede verse en la obra de Silvia Rivas; ella señala que es ella porque hay algo afuera, que si bien es inaccesible todo lo de afuera, la intuición es una certeza de que hay un afuera y un adentro. Es decir, que es posible definir la propia individualidad porque existe el otro, y porque existe un afuera. Por lo tanto, es a partir del afuera, de lo distinto que existe el yo. A través de estas obras, el espectador se sumerge en la propia subjetividad y se pregunta acerca de vínculo con el otro.

Dice Merleau-Ponty: “La percepción exterior y la percepción del propio cuerpo varían conjuntamente porque son las dos caras de un mismo acto”. Al vivir esta video instalación (porque de alguna manera puede decirse que se experimenta y no que se contempla), se toma un nuevo contacto con el mundo, con lo otro y de esta manera también se replantea el contacto con uno mismo.

En “Pequeño Acontecimiento” pasa algo parecido; este proyecto, al igual que en “Todo lo de afuera”, la artista trabaja con performers de la villa de la Caba. En “Pequeño Acontecimiento”, opone videos con tomas de los rostros de los protagonistas a videos en los que hace un travelling y pueden verse restos de una ciudad anónima. Una vez más, nos encontramos ante la ambigüedad que incomoda, hace responsable al espectador y que lo participa. Esta ambigüedad opone al individuo con lo anónimo de la ciudad. Para la artista los performers son arquetipos de identidad posiblemente mucho más representativos que la población de Capital Federal.

Esta obra plantea a su vez el tema de la soledad y de la condena a la propia individualidad. Los rostros miran al espectador y se presentan ante el mismo. Se establece un vínculo pero no se exhiben garantías. La artista deja en el espectador la responsabilidad del reconocimiento de la individualidad (propia y del otro) o continuar en el anonimato.

Para Levinas, el acceso al rostro no se reduce a la percepción. “Rostro y discurso están ligados. El rostro habla. Habla en la medida en que es él el que hace posible y comienza todo discurso. Hace poco he rechazado la noción de visión para describir la relación auténtica con el otro; el discurso y, más exactamente, la respuesta o la responsabilidad es esa relación auténtica”. Y Rivas logra transmitir estas ideas, estos interrogantes sobre la actualidad en una sociedad que está caracterizada por la comunicación narcotizante, en la que no quedan vínculos entre sujetos, sino que cada vez hay menos vínculo y menos observación del otro y de uno mismo. En definitiva, la denuncia de la artista es filosófica por encima del aspecto social y hace un llamando a tomar consciencia de esta realidad.

Desde esta misma perspectiva puede colocarse su próximo trabajo que presentará en septiembre de este año en el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (MALBA) en la que Rivas trata temas que pueden surgir de las vivencias cotidianas pero que van más allá, tienen una profundidad que, justamente, cuestionan la cotidianidad. En este caso, sobre la condena a la acción permanente, donde nunca nada se completa y muchas veces lo que uno hace no permite conseguir los resultados buscados, sino todo lo contrario. Esta vez, el tratamiento de la obra pone énfasis en un vínculo muy profundo entre el individuo y las tareas que realiza.

Esta idea de toma de consciencia puede verse atravesada en toda la obra de la artista, que puede decirse que incomoda. Silvia Rivas llama la atención sobre distintos aspectos de las vivencias que son cotidianas y a las que muchas veces se pasa por alto. Hay una reflexión profunda sobre estos hechos, sobre el tiempo que pasa, sobre el vínculo con el otro y el vínculo con uno mismo.

Este llamado de atención es logrado a través de la ambigüedad; donde un ojo que no puede abrirse se opone a un nudo de personas, o cuando el agua se opone a un par de piernas. Esta ambigüedad se justifica a través de metáforas o símbolos que son esenciales en el arte y no dejan de serlo en la poética de la artista.

A través de imágenes que se oponen, Silvia Rivas causa sensaciones en el espectador que generan el cuestionamiento sobre su propia cotidianeidad, sus relaciones con el otro y consigo mismo.

Bibliografía:

Emmanuel Levinas, Etica e infinito, Madrid, La Balsa de la Medusa (colección dirigida por Valeriano Vozal), A. Machado Libros S.A, 2000, página 56.
“Notas sobre el tiempo” fue presentada por Silvia Rivas en el Centro Cultural Recoleta en 2001. Con este trabajo la artista ganó la beca John Simon Guggenheim Memorial Foundation, Video Installation Art. Los videos pueden verse en la página web de la artista: HYPERLINK “http://www.silviarivas.com” www.silviarivas.com
Maurice Merleau-Ponty, Fenomenología de la percepción, Madrid, Editorial Planeta, página 87.
“Todo lo de afuera”, serie de videos y video instalaciones presentadas por primera vez en el Museo de Arte Moderno de Buenos Airee en junio de 2004. Los videos pueden verse en la página web de la artista: HYPERLINK “http://www.silviarivas.com” www.silviarivas.com
Emmanuel Levinas, op. cit, página 80.
Maurice Merleau-Ponty, op. cit, página 221
“Pequeño Acontecimiento”, video instalación presentada en el Espacio Telefónica en Buenos Aires, en el año 2006. Los videos pueden verse en la página web de la artista: HYPERLINK “http://www.silviarivas.com” www.silviarivas.com
Emmanuel Levinas, op. cit, página 73.

Catálogo de la exposición en Malba, 2010
Entrevista a Silvia Rivas
Por Franklin Espath Cardoso
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¿Cómo se dio el pasaje de tu obra anterior al video y cuándo fue eso?
Si bien había hecho algunos videos con anterioridad, el video me empezó a resultar necesario en el 98, trabajando en una serie de obras sobre papel y sobre acero con la idea de señalar a través de la imagen esa doble característica del tiempo de marcar y borrar en una misma acción. Luego, pensando el tiempo como un espacio que incluye y se abre en otros simultáneos, quería adjudicarle una materialidad y definirlo cualitativamente, la imagen en movimiento, un soporte cuya temporalidad está dada, me permitía modelar variables sobre esa base poética.

La temporalidad es bien evidente en todos los videos. ¿Creés que el soporte te proporcionó, digamos así, esta facilidad de demostrar el tiempo a través del movimiento?
Obviamente la temporalidad está implícita en la imagen en movimiento pero al no poner el acento en lo narrativo ni estructurarlo en términos de principio y fin creo que el tiempo y sus ritmos se manifiestan más claramente, como una entidad en sí misma, como un territorio en el que los eventos acontecen.

Cuando eliges los elementos que componen el video, ¿tienes siempre en mente objetos que tengan su propio movimiento o algo que sea a través de tu intervención técnica?
Los objetos o imágenes que intervienen en mis obras hacen las veces de signos o ideas, la elección y el desarrollo de lo que podría llamar escenas o secuencias son previas a cualquier técnica, a veces la toma del natural con su propia dinámica resulta eficiente, otras como en el caso de Zumbido, es una simulación, tengo que generar las dinámicas digitalmente. Una vez que tengo la idea busco el recurso.

Explica un poco más el proceso de realización de cada video. ¿Cómo lo concibes y cómo lo desarrollas a través de la técnica del video y de la computadora? ¿Lo piensas como un todo o el resultado es consecuencia de cada proceso?
Lo concibo como un todo, o tal vez como movimientos de una pieza musical. Siempre trabajo en series, aún antes de trabajar con video como soporte. En general cada serie consta de varias video-instalaciones que son distintos acentos de una situación general, luego voy fragmentando éste conjunto dependiendo de las características del espacio, a veces teniendo que reeditar todo el material para establecer un recorrido y un ritmo que genere una cierto resultado. El proceso técnico es en sí tedioso, supongo que sólo le tengo paciencia porque, aunque parezca increíble, lo encuentro bastante artesanal y porque fundamentalmente, me conduce al objetivo. La verdad es que siento cierta fascinación por las máquinas, se establece un vínculo como con cualquier otra herramienta pero siento que mi aproximación tiene más que ver con la del dibujante.

Los videos Zumbido (dinámicas) y Zumbido (trama incesante) hacen parte de tu última serie donde tratas la cuestión del tiempo de manera bien distinta. Veo que ellos se complementan aun siendo independientes. Cuenta cómo es el orden o ritmo de esta propuesta.
En éste caso trato la repetición como condición permanente y necesaria, el sinfín más que un recurso de presentación es el carácter de la situación. En Zumbido (dinámicas), a través de una sucesión de escenas quiero señalar el desplazamiento y cierta contradicción entre una acción y su resultado, generar una dualidad entre exasperación y complacencia en un vínculo inevitable, trato de cuidar lo rítmico y lo formal, la acción se desarrolla en un ambiente diáfano. Por el contrario, en Zumbido (trama incesante), en un ambiente oscuro, sin referencia espacial concreta se desarrolla una acción tan obstinada como inútil. Los videos hacen un contrapunto formal y señalan distintas cualidades de una acción y su consecuente reacción.

Estas son acciones y reacciones controladas que generan dualidades. Pero al mismo tiempo ¿el observador también hace parte de toda la situación con distintas reacciones?
Eso espero. Mi idea es provocar en el espectador una experiencia generadora de asociaciones concretas.

¿Cómo encaras la afirmativa de que el tiempo no existe, siendo mera abstracción humana? Tanto corrientes místicas cuanto nuevas teorías de la física quántica afirman esto.
No diría que no existe, no diría que una abstracción humana no existe… seguramente, ya nos avisaron, no existe con la linealidad que lo percibimos pero, más allá de las certezas de nuestro pensamiento, nuestra percepción es nuestro cerco. Como te dije pienso el tiempo como infinidad de corredores y estancias donde los acontecimientos se ubican y al otro, cualquier tipo de otro como lo que define el cerco.

Al elegir la mosca –un insecto que causa aversión–, ¿buscas chocar al público o simplemente despertarlo?
Busco una identificación, quiero que opere como metáfora de un vínculo ineludible. Es un bichito simple y cotidiano, que nos obliga a jugar su juego hasta la exasperación sin darse por aludido.

leedor.com, 2010
Zumbido
Por Kekena Corvalán
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Silvia Rivas despliega sus máximos recursos y se afirma como una videoartista consecuente con su propia poética, con una propuesta de imagen impecable.

Egresada de la Escuela Nacional de Bellas Artes como escultora, la trayectoria de Rivas dentro del mundo del videoarte comienza oficialmente con su primera videoinstalación en 1993 (Museo de Bellas Artes, con curaduría de Jorge Glusberg y Laura Buccellato) y se reafirma con la obtención de la Beca Guggenheim y su exposición consecuente en 2001. Así, hitos fundamentales son Notas sobre el Tiempo (2001), Acontecimientos débiles (2002), Episodios mínimos (2006).

En esta ocasión, se trata de dos videos, Zumbido (dinámicas) y Zumbido (trama incesante), acompañados por la exhibición de uno de sus dibujos, a la manera de un ”anti still”, boceto donde la artista se imagina y crea, se vuelve profética, no como fotografía del producto terminado, sino como posible mapa de lo que tiene en su cabeza.

El hecho de que todo el proyecto lleve el nombre de un efecto acústico, indica quizás la importancia que la artista le da al tema del sonido, elemento que acompaña de manera muy lograda la propuesta plástica.

Creemos que Zumbido puede ser leída como un punto de inflexión en su propia poética, no desde la temática, en la que sigue fiel a su filosofía del tiempo como lugar de contradicciones, múltiple y espeso, que se transforma en espacio, sino por sus búsquedas formales.

En efecto, Zumbido representa un nuevo corte sobre el tema de las acciones inútiles, la tenacidad de luchar contra lo que, a pesar de que se venza, siempre recomenzará.

Pero hay tres características que podemos leer, y quizás permiten esbozar una vuelta de tuerca en referencia a toda su obra anterior: el cambio a una estética menos barroca y más minimalista: de Zumbido (dinámicas) que contrasta con la casi prácticamente oscura sala de la instalación que sigue a Zumbido (trama incesante) donde el blanco que nos ciega se convierte en un negro que también nos aturde, explorando la luz (categoría que permite articular como pocas la intersección tiempo/espacio, tema que leemos recurrente en Rivas); la casi ausencia de esa imagen pixelada y pincelada, que tiene por ejemplo toda la serie de Lluvia, en Notas sobre el tiempo, y en relación con estos dos aspectos, justamente, la relación con el cine.

Hay algo distinto a todo lo realizado que Zumbido aporta, y tiene que ver con otra voluntad narrativa, cierta pequeña noción de conflicto que asoma, las referencias a la mosca obstaculizando una pantalla y hasta una dosis de humor.

Lo demás, desde el foco puesto en la inutilidad de ciertas acciones, la imposibilidad de cerrar procesos que recomienzan ni bien se superan, la circularidad del tiempo que al repetir la misma acción y reacción se sostiene tan idéntico que se conforma como espacio, y la elección de un hecho banal y cotidiano como metáfora de planteos más existenciales, conforma un decir que es fiel a la poética de Rivas.

Experiencia que hay que transitar, en un lenguaje, el audiovisual, que reina, pero saturando de significantes que son como moscas, no nos dan tregua, ensordecen y no dicen nada.

Zumbidos es una tela de moscas dibujadas, filmadas, fotografiadas, que nos aturden, nos molestan, nos obligan a movernos todo el tiempo, pero también nos brindan una experiencia estética y nos largan fuera con cierto recuerdo de todo aquello que por más que hagamos nunca alcanzará.

Imagen que ilustra la nota: Silvia Rivas, Zumbido (dinámicas), 2010. De la serie Zumbido [detalle]
Videoinstalación de un canal multidisplay.

Zumbido
Contemporáneo 26.
MALBA. Planta Baja.
Figueroa Alcorta 3415. CABA
Del 10 de septiembre al 22 de noviembre.

Obras en exposición:
Zumbido (dinámicas), videoinstalación de un canal multidisplay. Duración 3′ 50”.
Zumbido (trama incesante), videoinstalación de un canal. Duración 3′ 50”.
Colaboración técnica: Juan Pablo Ferlat. Diseño de sonido: Luciano Azzigoti. Performance: Julia Edo.
Zumbido 1. Grafito sobre papel. 104×450 cm.

Arte al Día, 2010
Silvia Rivas: Zumbido en Malba
Por Rodrigo Alonso
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Como parte de una nueva edición de su programa Contemporáneo, dedicado al arte actual, local y regional, se exhiben en el Malba, dos videoinstalaciones de la artista Silvia Rivas (Buenos Aires, 1957), pertenecientes a la serie Zumbido, que abordan la cuestión del tiempo y su materialidad, temática que viene planteando a lo largo de toda su trayectoria en video.

Desde hace más de una década, Silvia Rivas ha incorporado el video como medio central en su producción artística. Interesada por su capacidad para plasmar ideas visuales arraigadas en el tiempo, los trabajos de Rivas exploran situaciones desde éste se materializa como una presencia insoslayable, con frecuencia, ligado a una acción continua y reiterativa que estimula una sensación de duración (la durée bergsoniana) que se manifiesta casi en el nivel corporal.

En su recordada muestra individual en la sala Cronopios del Centro Cultural Recoleta (Notas sobre el tiempo. EL tiempo como escenario, 2001), el fuego y la lluvia eran los protagonistas de esa persistencia sostenida, dos elementos que funcionaban a su vez como metáforas del mundo. Aquí, el núcleo visual se encarna en algo acaso más pedestre: un conjunto de moscas en vuelo. No obstante, este tema permite continuar e incluso profundizar su investigación.

A pesar del intento por huir de la narración –intento que la propia artista expresa en una entrevista con Franklin Espath Pedroso, curador de la exposición, publicada en el catálogo- se percibe aquí un desarrollo temporal estructurado en base a acciones y reacciones, estados y progresiones, que organizan un atisbo de línea argumental aunque sin un principio ni un final evidentes.

Una de las piezas en exhibición es la más orientada en este sentido: la videoinstalación Zumbido (dinámicas), 2010, en la que una mano intenta matar una mosca, pero cuando lo consigue, lo único que logra es generar un enjambre más molesto y enrarecido, que poco a poco se dispersa hasta confluir en la mosca original que reinicia el proceso. El episodio es claramente una excusa. Más bien, como en su obra anterior, se trata aquí también de cuestionar el presunto realismo del video.

En sus trabajos con el agua y el fuego, Silvia Rivas solía incluir unas figuras geométricas que atravesaban la pantalla generando un extrañamiento de la imagen y un desmoronamiento de su propio documental. En la serie que se presenta en el Malba el cuestionamiento se produce en el camino opuesto, es decir por un exceso de realismo. La naturaleza hiperreal de los videos que conforman este proyecto es al mismo tiempo seductora y sospechosa, fascinante y artificial. Convoca nuestra mirada con una fuerza irresistible, pero no puede ocultar la ausencia de realidad sobre la que se funda. En este sentido, su visión promueve una reflexión sobre el poder del relato audiovisual, sobre sus promesas y sus peligros.

En contraste con Zumbido (dinámicas), que se desarrolla sobre una extensa superficie blanca, una sala oscura alberga Zumbido (trama incensante), 2010, una video instalación en la que todo atisbo narrativo se ha disuelto en una coreografía infinita de brazos y moscas. Como en la anterior –o quizás aquí aun más- el sonido es una pieza fundamental, ya que genera un ámbito envolvente que expande la acción más allá de la pantalla. La habitación, sin más iluminación que la que produce la proyección, pierde sus límites hasta dejar al espectador en un estado de contemplación no menos intenso que el de la sala anterior y ante una imagen no menos ilusoria que aquella.

La muestra se completa con un dibujo sobre papel. El soporte estático conserva las huellas de esos movimientos frenéticos en líneas que se esparcen sobre su superficie como los rastros de un acto inasible. Su presencia cierra el circuito con la paradójica constatación real de un hecho que sólo tuvo existencia en el universo virtual, para abrir una nueva pregunta sobre las imágenes y sus referentes.

Hasta el 22 de noviembre Malba, Buenos Aires, Av. Figueroa Alcorta 3415

Catálogo de la exposición en Fundación Alon, 2012
La reiteración en la obra de Silvia Rivas
Por Horacio Zabala
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Un cuadro está en el tiempo, pero no
tiene una “duración” en el sentido en
que la tiene una sinfonía o un film.
Una sinfonía se ejecuta en el espacio
pero no es larga, ancha o alta en el
sentido en que lo es un cuadro.
Luis J. Prieto

Sólo importa la intensidad.
Georges Bataille

El espacio es firme, sus dimensiones son mensurables. El tiempo, en cambio, es algo que la naturaleza misma ya ha dividido en partes a través del movimiento de las estrellas y el cielo, de la sucesión de las estaciones y los días. Sin embargo, los hechos de la vida cotidiana son imprecisos: sólo cuando la civilización urbana necesita precisión en el trabajo productivo y en la economía se comienza a medir el tiempo.

La pintura, la escultura, la arquitectura, el grabado, el dibujo, etc. son objetos que permanecen en estado de reposo: no cambian sus cualidades físicas con el tiempo que pasa, salvo por causas extrañas a ellos. A un concierto puedo llegar tarde, y en consecuencia, perderé su comienzo; a un cuadro no puedo llegar tarde ni temprano, pues siempre permanecerá ante mi mirada sin cambio alguno. El pintor no decide cuánto dura mi contemplación de su obra, soy yo mismo quien lo decide. En el caso de la obra musical, es el compositor que determina su duración, su principio y su fin.

La danza, la música, el teatro, el cine, el video, sus combinaciones y variantes como las performances y las instalaciones son artes efímeras. Estas artes de la duración, irrumpen de diferentes maneras en las artes plásticas, aproximadamente desde 1960 (si bien sus antecedentes se remontan a las vanguardias históricas). Desde hace más de medio siglo, las imágenes móviles (inestables, temporales) se alternan, yuxtaponen y tienden a alterar la percepción estética de las imágenes fijas (sin metamorfosis, sin duración).

El ojo humano, a causa del fenómeno conocido como persistencia de la imagen en la retina, no logra distinguir las fases sucesivas de un movimiento más allá de una décima de segundo. El congelamiento de las fases sucesivas de los movimientos de un caballo al galope (Eadweard Muybridge, 1887) reveló formas imperceptibles y por lo tanto desconocidas. Éstas, sin embargo, están radicadas en la realidad espacio-temporal de la cual somos parte. Si aceptamos los análisis sobre la sociedad del espectáculo y nuestra ineludible sobreexposición al bombardeo de imágenes, debemos prestar atención al arte contemporáneo. En especial, a aquellas creaciones que se desvían e interrumpen el flujo veloz de las imágenes de los mass media que hace que todo se pierda y evapore al instante. La obra de Silvia Rivas muestra y habla del tiempo que pasa desde otro lugar, desde la lentitud y la distancia.

Zumbido está hecha de préstamos tomados de la ficción y la realidad, de lo artificial y lo natural. Es una obra digital o virtual, o sea que no sucede en un lugar específico de la “realidad real”. Sin embargo, se vincula con ella de forma indirecta, tal como lo hace, por ejemplo, el lenguaje. Lo virtual (lo posible) se convierte en un mundo con “otras reglas” situado junto al mundo real.

Zumbido es el resultado de una exploración a propósito de la intensificación de algunos vínculos emocionales del ser humano con respecto al simple hecho de no estar solo en el mundo. La tranquilidad entendida como ausencia de perturbación debida a fenómenos exteriores molestos o riesgosos no es duradera ni fácil. En el mundo hay innumerables insectos y en particular hay moscas. Irrumpen cuando quieren y su vecindad nos causa irritación, a veces insoportable: las moscas nos resultan repulsivas y peligrosas a la vez por las posibilidades de contagio: son insectos cosmopolitas y pestíferos.

La obra crea un espacio y un tiempo donde coexisten las imágenes móviles de las manos de una persona (real) con las imágenes también móviles de moscas (virtuales) dotadas de las mismas características inquietantes que las vivas. A la “realidad” de las manos se le añadieron imágenes “intencionadas” de insectos que, de alguna manera dieron lugar a una “realidad aumentada” y desconcertante. La escena, resultado de la interacción entre lo humano y lo no-humano, no deja de ser un transporte de sentido, una metáfora: señalando un hecho a la vez se señala otro. Los insectos son una huella visible de las relaciones in-visibles (pero sensibles) entre el ser humano y algunas situaciones de su contexto real, simbólico e imaginario.

Zumbido está impregnada de tiempo, sea debido a que la obra se despliega en una duración, como el desarrollo melódico estructura una obra musical, sea porque su iconografía da cuenta de la tensión que provoca un enjambre de moscas en movimiento. En esta obra ¿que pasa con el tiempo que pasa?. Es un tiempo en el que el presente se “alarga” con insistencia. El espectador espera (desea) que pase algo definitivo pero nada pasa, espera que la nube de moscas se disuelva como una nube de polvo, pero la nube va y viene, y su zumbido hostil persiste, aumenta, disminuye, fastidia sin una causa o motivo: porque sí.

Ante el enjambre de moscas, la agitación de la protagonista se manifiesta en los movimientos espasmódicos de sus manos. Éstas libran una suerte de combate desigual para espantar la amenaza de las moscas y así recuperar y conservar la calma perdida. Al principio las manos permanecen quietas sobre una mesa: reflejan un momento de la vida cotidiana donde el tiempo transcurre sin interferencia alguna, vacío y puro. Cuando aparecen las moscas el estado de quietud cambia. Las manos se mueven para espantarlas. En el intervalo marcado por las manos quietas (sin moscas) y las manos agitadas (con moscas) aparece otra noción de tiempo, completamente diferente a su puro transcurrir.

La obra de Silvia Rivas tiene el ritmo de una respiración agitada. Tiende a ser lo contrario de todo apaciguamiento, tranquilización y aseguramiento. ¿Cómo se experimenta el tiempo? es una de las preguntas implícitas de la obra: la protagonista no puede volver al su pacífico “paraíso perdido” libre de perturbación. Debe aceptar su propia vulnerabilidad con respecto al azar. Esto es, el amargo malestar ante la reiteración imprevista, estúpida y maligna de lo mismo (una y otra vez lo indeseado). Ella deberá aceptar una suerte de “eterno retorno” del zumbido con todos sus atributos negativos. Las moscas acecharán su leve aburrimiento y sus distraídos ensueños que “matan el tiempo”. O mejor, que matan el tiempo vacío que nada dice.

A picture exists in time, but it has
no “duration” in the sense it has in
a symphony or a film.
A symphony is executed in the space
but it’s not long, wide or tall in the
same sense that it is in a picture.
Luis J. Prieto

Intensity is the only thing
that matters
Georges Bataille

The space is firm, it’s dimensions are measurable. Time, on the other hand, is something that nature has divided into parts throughout the movement of the stars and the sky, the succession of the seasons and the days. Nevertheless, the facts of daily life are imprecise: it is only when urban civilization needs precision in productive work and in the economy that we begin to measure time.

Painting, sculpture, architecture, print, drawing, etc. are objects that remain in a state of repose: they do not change physical qualities with the passing of time, except for causes foreign to themselves. To a concert I can arrive late, and consequently, I will miss the beginning; to a painting, I can’t neither arrive late, nor early, as it will always remain without change before me. The painter does not decide the length of my contemplation to his work of art. I decide by myself. In the case of the musical work, it is the composer that determines the length of the piece, its beginning and its end.

Dance, music, theater, cinema, video, its combinations and variations as well as the performances and installations are ephemeral arts These arts of duration, have invaded plastic arts since 1960 in different ways (although its antecedents were originated inn historical vanguards). Since over half a century ago, mobile images (unstable, temporal), alternate, juxtapose, and tend to alter the aesthetic perception of fixed images (without metamorphosis, without duration).

The human eye, as a consequence of phenomena known as the persistence of the image in the retina does not recognize the successive phases off the movement further than a tenth of a second. By freezing the successive phases of the movement of a horse galloping (Eadweard Muybridge, 1887) revealed imperceptible, and as a consequence unknown forms. These, nevertheless, are radicated in space-time reality which we are part of. If we accept the analysis about the Society of the Spectacle and our unavoidable over-exposure to the bombing of images, we must pay attention to the contemporary art. Specially to those creations that deviate and interrupt the speedy flow of images in mass media, which makes everything, disappear and evaporate instantly. The work of Silvia Rivas displays and tells us about the time that goes by as seen from another point of view, from its slowness and distance.

Buzzing is created from borrowings taken from fiction and reality, from the artificial and the natural. It is a digital or virtual work, that is to say, it does not happen in a specific place, of “real reality”. Nevertheless it links to it in an indirect way such as, for example, language. The virtual (the possible) is converted to a world with “other rules” situated beside the real world.

Buzzing is the result of an exploration in regard to the intensification of some human emotional ties in relation to the simple fact of not being alone in this world. The tranquility understood as the absence of perturbation due to external annoying or risky phenomena is neither lasting nor easy. In the world there are countless insects, especially flies. They barge in when they want and their presence causes us irritation, sometimes unbearable: we consider flies repulsive and dangerous at the same time because of the possibility of infection: they are cosmopolitan and pestilent insects.

The work creates a space and a time where mobile images of human hands (real) with images also mobile flies (virtual) coexist endowed of the same intriguing characteristics as the live ones. To the “reality” of the hands, “intentioned” images of insects that, in some manner, gave place to an “enlarged reality” and a puzzling one were added. The scene, resulting in the interaction between the human and non-human, is meant as a transportation of a direction/sense*, a metaphor: pinpointing a fact that in turn points to another one. The insects are a visible print of the in-visible (but sensitive) between the human being and some situations of its real context, symbolic and imaginary.

Buzzing is impregnated by time, either because the work displays in duration, like the melodic development structured in a musical piece, or because of its iconography, which evidences the tension provoked by a swarm of flies in movement. In this work, what happens with the passing of time? It is a time in which the present “extends” itself with insistence. The spectator expects (wishes) something definite to happen but nothing happens, he expects the cloud of flies to dissolve as a cloud of dust does, but the cloud comes and goes and its hostile buzz persists, increases, diminishes, annoys without a cause or reason: just because.

Because of the swarm of flies, the agitation of the protagonist is manifested in the spasmodic movements of the hands. They encounter in an uneven battle to chase the threat of the flies and in this way recover and maintain the lost calmness. At the beginning the hands remain quiet on a table: they reflect a moment of the daily life where time passes without any interference, empty and pure. When the flies appear the state of calmness changes. The hands move to scare them away. In the interval marked by the quiet hands (without flies) and the agitated hands (with flies) the notion of time appears completely different to its pure passing.

The work of Silvia Rivas has the rhythm of an agitated breathing. It tends to be the contrary to any appeasement, calmness and reassurance. How do we experiment time? It is the implicit question in this work: the protagonist cannot go back to her pacific “lost paradise” free from perturbation. Its own random vulnerability must be accepted. This means, the bitter discomfort caused by the unexpected repetition. Stupid and evil of the same (again and again the undesired). She must accept her luck of the “eternal return” of the buzz with all its negative attributes. The flies will prey on her light boredom and her distracted daydreaming that “kill time”, or better said, that kill empty time that says nothing.

Olga Martínez 2013
De un tiempo a esta parte
Por Olga Martínez
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La arquitectura acristalada de Fundación Proa permite experimentar una sensación de levedad casi abismal, el ángulo abierto de la visión capta una postal, que como un elemento más se integra al espacio de la institución. Esa postal nos muestra una imagen estática tomada, la mayor parte de las veces, desde un punto de vista que la hace única. La pregnancia de esa imagen adquirida se anticipa a la observación, y pareciera que todo tiempo se detiene.
Tres intervenciones contemporáneas nos reinstalan en esa imagen quieta al perturbar el espacio desde donde miramos y poniendo el tiempo en movimiento.
(…)
Silvia Rivas interviene los muros con dibujos de la serie Odisea invisible, en la cual la sucesión reiterada del gesto da vida a la trama de un viaje, por momentos el vuelo de insectos en éxodo o en avance, sus desplazamientos.
La naturaleza es un tema largamente visitado en la obra de Silvia Rivas: el mar, el delta, la lluvia, los gusanos de seda, las moscas, los insectos, y nosotros mismos en nuestra condición humana le abrimos paso al tiempo, una obsesión en su obra -que en algún momento la hizo mudar de soporte hacia el video en su afán de asirlo con diversa eficacia-.
Esta obra toma a su vez y virtualmente el espacio aéreo del primer piso que sólo en el encuentro con el muro se hace visible. El gesto obsesivo y a la vez poético, que abunda en espirales y arabescos, mueve las alas o echa a volar lo invisible, y el tiempo se despliega hasta alcanzar la noche en el muro opuesto. La mancha negra de grafito es el escenario del vuelo nocturno que perdemos cuando el gesto alcanza el vacío. Las vidas breves y plebeyas de los insectos ocuparán de pronto toda la atención del público.

Las tres intervenciones presentadas por La Padula, Montagnoli y Rivas se entrecruzan, unas veces en diálogo sonoro, otras en sus aportes de silencios. En esta convivencia temporal nos invitan a desplegar la imaginación entre lo humano y lo natural, desde un tiempo lejano a esta parte.

Valeria González
Momentum
Por Valeria González
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“En vano intentamos controlar el decurso de nuestras vidas. Tal vez nuestra potencia se manifieste como vivencia sólo en el instante previo a cualquier desenlace, en la condición de vértigo, en la sensación de despertar en el aire”.

Silvia Rivas

La obra actual de Silvia Rivas es una desembocadura, o un recodo profundo, de las reflexiones sobre el tiempo que viene trabajando desde la importante videoinstalación presentada en 2001 en la Sala Cronopios del Centro Cultural Recoleta. En aquel momento, el entero espacio era tomado por una orquestación de sincronías y divergencias y el espectador sumergido en ella tomaba conciencia de la percepción como vivencia corporal. Rivas desarmaba en múltiples capas la sensación de velocidad, la milenaria metáfora del tiempo como agua que corre. Hoy, encontramos a la artista investigando sumergida en la trama infinitesimal del instante.

“Inconsciente óptico” llamó Walter Benjamin a la posibilidad de acceso del ojo humano hacia trasfondos antes insospechados, abiertos entonces por las nuevas tecnologías como la fotografía y el cine. Estamos familiarizados –decía en 1931- con el andar de la gente, pero nada sabíamos del segundo exacto en el que un paso comienza a desplegarse. Si el pintor –remata en 1936- es como un mago que diagnostica mirando o palpando un cuerpo, el fotógrafo o el cameraman proceden en cambio como un cirujano, adentrándose profundo en el tejido de los hechos. O como el psicoanalista, que penetra más allá del discurso del yo de la conciencia, en su misterioso motor inconsciente.

Si, paradigmáticamente, la fotografía congela un instante, Silvia Rivas utiliza en este caso el video como un medio para dilatar los bordes de ese momento decisivo. Todo verdadero paso adelante dado en la vida es una caída al vacío: la artista puntúa esa escena en que una decisión ha impulsado a un cuerpo hacia un espacio lleno de potencias pero aún en gran parte ignorado. Y elige detener, o más bien estirar ese instante previo al decurso de un desenlace, como alusión –a la vez universal y situada- de la encrucijada existencial, doblemente inexorable y libre. Para poder comunicar al espectador la intensidad y el espesor de ese “momentum”, la artista trabajó con actores y con equipos de filmación de altísima definición. En la primera pieza, la dilatación fílmica de un gesto mínimo se yuxtapone a la frágil fijeza del mismo gesto grabado en mármol. El elemento escultórico se emparenta doblemente con el acto fotográfico, porque –como ya señaló Duchamp- el vaciado por moldes es indicial como una huella lumínica y porque, en tanto fijación de un “esto ha sido” (Barthes), toda fotografía -tanatografía- cumple una función semejante a una lápida. En otra obra, la posibilidad de capturar trazas de movimiento le permite a Rivas expandir fantasmáticamente un gesto en múltiples posibilidades, como si cada instante encarnara, en su propio núcleo mínimo, un abanico de senderos que se bifurcan.

La tercera pieza es clave. Todo el esfuerzo de la cura freudiana apunta a liberar al sujeto de las trabas de sus propias certezas, volverlo capaz de soltar y dejarse “caer” en el derrotero ignoto de su deseo. Una misma performer encarna la doble acción en un díptico especular. Recordemos que también es esencialmente especular el desdoblamiento del Gran Vidrio: ellos y ella, mar y cielo, “mar” “cel”, el nombre del artista que, contrariando la euforia futurista por la velocidad, propuso el rétard como modelo conceptual. No dejarse engañar por el imaginario del avance, propuso Duchamp, sino encarar su disección. Rétard en verre (retardo en vidrio) o rétard envers, retardo que permite espiar el reverso del movimiento, la trama oculta de un impulso hacia un polo de atracción. Tres piezas que nos dejan atisbar los futuros resultados de un gran work in progress que ocupa actualmente a Silvia Rivas, sumergida en el flujo del tiempo para señalar que la subjetividad no se constituye, como queremos creer, a través de metas prefijadas sino como un verdadero “despertar en el aire”.

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Silvia Rivas

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